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ATE Rosario lamenta el fallecimiento de Francisco ‘Pancho’ Dolmann


Ante la reciente muerte del dirigente de ATE Nacional y del INTI, Pancho Dolmann, la seccional realizó una asamblea homenaje en memoria al referente. Compartimos las palabras de la compañera Mariana Elizondo, quien lo recuerda como un dirigente: “abierto al diálogo, a mediar entre las autoridades y los empleados, asegurándose que nuestras voces sean escuchadas. Todas”. 



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Asamblea homenaje a Pancho Dolmann en Rosario
 

Compartimos las palabras de la compañera Mariana Elizondo:

Francisco Dolmann, Pancho, como casi todos lo llamábamos, era la imagen de la lucha por nuestros derechos como trabajadores en el INTI. Claro que no se quedaba ahí nomás, porque logró ser un referente a nivel nacional de los empleados estatales. Siempre abierto al diálogo, a mediar entre las autoridades y los empleados, asegurándose que nuestras voces sean escuchadas. Todas. 

Siempre dispuesto a dar pelea por los reclamos de los trabajadores, por ayudar a los compañeros, siempre dando apoyo concreto. Un dirigente suficientemente humilde y servicial como para atender siempre el teléfono.

También, siempre presente con un mensaje de apoyo para los que no nos desempeñamos en Buenos Aires, trayéndonos la información útil que requeríamos, facilitando la comunicación entre los afiliados de todo el instituto. 

De los últimos años vividos, lo recordaremos por una de las luchas más duras que se dieron en INTI, al mantener el acampe, en condiciones completamente hostiles, hasta que se reincorporó hasta el último de los despedidos por el macrismo. 

Yo lo recuerdo dándome ánimo, para que me presente como delegada de mi centro, diciéndome que estuviera tranquila, que no iba a estar sola, que él y los otros compañeros iban a estar para apoyarme. Siempre hablando con la verdad, algo que valoro muchísimo. Siempre atento a lo que pudiera necesitar. 

Hoy nos queda despedirlo, pero no sin antes recordarlo bien: su integridad, su fuerza, su empuje, su capacidad para negociar, para escuchar y también para pedir prudencia cuando nuestras acciones podrían habernos perjudicado. También nos queda, como afiliados, seguir construyendo el bienestar de los trabajadores, la unión, la comunicación y la cooperación, como era su estilo. Sin perder el rumbo, la cohesividad y la coherencia de nuestras acciones.

¡Hasta siempre, Pancho querido. Es mi deseo que podamos seguir en el buen camino que empezaste en nuestro instituto!


Mariana Elizondo
Referente y trabajadora del Instituto Nacional de Tecnología Industrial de Rosario